domingo, 2 de agosto de 2015

Le robaron el balón


























Por: Juan Francisco García
Twitter:@jfgarcia2809

Roa, con mucha calidad, le entrega el balón a Otálvaro por encima, éste lo recibe, encara prolijo, llega hasta el fondo y centra  con veneno y precisión hacia atrás. Morelo va entrando al área, lo piensa, “voy a tirar un taco”, se perfila, taconazo: gol. Golazo. Min 21. Santa Fe 1, Alianza 0.

Hasta el gol de Play Station de Morelo, Santa Fe había tenido los peores 20 minutos en lo que va de la Liga. Los tuvo, en gran medida, porque Alianza Petrolera vino con un plan: ganar el balón, hacer posesiones largas, poner el ritmo del partido. Y los tuvo porque en la mitad, sin Seijas, Santa  Fe perdió orden y sincronización. Alianza lograba, gracias al gran pie que tiene de la mitad para adelante, neutralizar la intensidad del equipo rojo en la capital.

Pero pasa que Santa Fe es eficaz. Y cuando las cosas se ponen mal cuenta con circuitos que lo sacan del aprieto. Se juntó la banda feliz y a celebrar. Aunque también pasa que Santa Fe sigue en su búsqueda de hacer sólida la mitad de la cancha y, ayer, Alianza encontró los vacíos y le ganó la posesión.

Entonces el partido se hizo lento. Alianza con el balón, respirando, amigándose con el reloj, y Santa Fe sufriendo para recuperar el balón con rapidez,  ofendiendo como menos le favorece: esporádicamente. De un balón parado cobrado por Pérez surge un conrtragolpe que maneja a la perfección Alex Castro y que define el Uruguayo Figoĺí. Empate a un gol. El primer tiempo se fue así: Alianza haciendo su negocio  y Santa Fe incómodo, por primera vez, verdaderamente incómodo desde que empezó la temporada.

En el segundo tiempo siguieron los problemas. Omar Pérez debía correr más pensando en recuperar que en atacar. Darío Rodriguez, hasta la entrada de Anchico, jugó un partido para el olvido, Villarraga dejó claro que no está al nivel de Mosquera. Alianza, ordenado, feliz con el empate, logró que la cancha nunca se inclinará hacia su arquero, el guatemalteco Jérez.

El primer empate de la temporada deja conclusiones interesantes para pensar en el trabajo que se le viene a Peluso.

1. El primer equipo que vino con la intención de disputarle la posesión a Santa Fe, desnudó sus vacíos en la mitad y  le negó el control del juego.

2. Darío Rodriguez deja dudas en el rol de volante mixto que le exige Peluso. Es efectivo para romper, pero defensivamente se le ve inmaduro e ineficaz. Extraño que Anchico haya ido al banco.

3. Sigue habiendo mucho por trabajar entre líneas. Cuando Salazar sale a romper se abre un espacio entre él y la primera línea que se debe estrechar. A veces no viajan juntos. Salazar rompe y los defensas aguantan cuando también  deben avanzar.

4. La banda derecha da miedo. Da miedo cuando es para atacar y es de aplaudir. Otálvaro, Roa y Quiñones hacen parar de la silla. Pero en defensa, la cobertura de la espalda de Otálavaro es lenta. Los equipos lo saben y cada balón a su espalda es un puñal, que también da miedo.

5. La banda izquierda debe fortalecerse. Ayer, sin Mosquera y sin Seijas, fue casi del todo infértil. La derecha debe ser el espejo. En el Campín debe ahogarse por izquierda y por derecha.

6. Todos quieren a Morelo y a Quiñones. Aunque ayer no estuvieron finos, su nivel es de otro fútbol. Siempre vivos, siempre peligrosos, siempre encuentran el espacio. Cuando Santa Fe se hace del balón tiene en sus dos puntas dos lanzas afiladas.

7. Sí hay variantes: ayer jugaron Vargas y Ángulo ( que debutó en Liga Aguila). El primero es una buena alternativa para remplazar a Omar Y formar un 4 4 2 más Ortodoxo. Y el segundo es interesantísimo. Junto a Morelo y Quiñones cierra una delantera top.

En la semana empieza la copa, no hay margen de error. A seguir trabajando.


No hay comentarios:

Publicar un comentario