jueves, 25 de junio de 2015

¿Cómo jugarle a Argentina?




 Por: Sebastián Nohra

El pálido rendimiento ofensivo de Colombia provocó que se llegue a un partido de esta naturaleza antes de lo previsto. Un gol, era la diferencia entre enfrentar a once óptimos jugadores de la liga boliviana y enfrentar a Messi y su legión. La limitación del equipo para desequilibrar en los últimos 25 metros, la dificultad para avanzar en bloque con posesión, el bajo rendimiento de jugadores importantes y las bajas de Edwin Valencia y Carlos Sánchez, obligan a Pékerman a ser más protagonista de lo deseable.

Sin sus dos mediocentros titulares, el técnico debe reordenar el tablero. En condiciones normales -hablo de disponibilidad de plantilla y de rendimiento- Colombia jugaría con su 4-2-2-2, saldría a presionar, a proponer, a circular, a hacer lo que viene haciendo los últimos cuatro años. Pero el contexto lo impide. En el fútbol como en la vida, el contexto lo es todo -o casi todo-. Hay una serie de matices que obligan a que Colombia piense más en Argentina, y Argentina más en el partido. La ausencia de sus mediocentros, coincide con la tarea de frenar al jugador con el mejor uno a uno del mundo. Ninguna precaución será innecesaria.

Gran parte de las opciones de la selección Colombia, dependerán de que Don José, tenga una acertada interpretación de la pizarra. El libre albedrío y la fantasía de James y Cuadrado, deberán darle paso, en cierta medida, al pulso del entrenador. Enfrentar a Messi, Aguero, Di Maria, sin mediocampo titular y estar, a la vez,  preparados para atacar bien, requieren de las mejores artes de Pékerman. 


 PRIMERA OPCIÓN 4-4-2 o 4-4-1-1


Si alguna certeza había apenas terminó la primera ronda, es que Alexander Mejía será titular. Es el único mediocentro natural, y el equipo deberá sostenerse en su funcionamiento. La opción más conservadora y que se ajusta más a los automatismos que usa el equipo, son dos líneas de cuatro, que presionen y basculen juntas. Jugar con un equipo más corto de lo habitual. El reto principal, será evitar que Mascherano y Biglia encuentren entre líneas a Pastore y Messi, que son muy difíciles de referenciar, porque juegan descolgados y sueltos. Por eso, Zapata y Murillo, tendrán que vigilar disciplinadamente el espacio entre ellos, Mejía y el otro mediocentro que juegue.

Con esta opción, el compañero de Mejía estaría entre Franco, Zuñiga y Edwin Cardona. Las tres opciones tienen limitaciones. Franco va bien arriba, conoce la posición y tiene condiciones para generar juego. Sin embargo, no ha jugado un solo minuto en la Copa y es difícil pensar que sea titular en un partido tan gordo. Zuñiga es técnico, habilidoso, circula muy bien, pero no conoce el puesto y para ganar segundos balones y por arriba, supondría una gran debilidad.

Para solucionar los problemas del equipo para avanzar con balón, Cardona sería la mejor opción. Tiene personalidad, carácter. Buen pie, si está en su día, Colombia podrá encontrar juego por dentro. Pero es difícil imaginar a Cardona cumpliendo con el despliegue y el orden físico y táctico que el partido de mañana exige. Con esta opción, Colombia jugaría con: Ospina, (Zuñiga o Arias) Zapata-Murillo, Armero; Cuadrado- (Franco, Zuñiga o Cardona)- Mejía, James; Teo- Falcao.




 

SEGUNDA OPCIÓN 4-1-4-1

La última vez que Colombia jugó así, fue con el ¨Bolillo¨ en la pasada Copa América. Era entonces, un equipo totalmente diferente a este. Ahora, sin Valencia y Sánchez y con la urgencia de impedir que Pastore y Messi encuentren verde para conducir a la espalda de los volantes, parece una buena opción que Mejía juegue de furioso dragón custodiando la entrada del Castillo. Este es un sistema que no se ha entrenado, y exige una mayor coordinación de movimientos entre las líneas.

Con esta propuesta, Colombia sería un equipo mas contragolpeador. Podría usar en las bandas a Cuadrado e Ibarbo para buscar las espaldas de Zabaleta y Rojo. Jugar juntos, en bloque. Estar estirados y largos, sería un suicidio. James jugaría delante de Mejía con Cardona o Cuadrado. En esa posición es muy buen lanzador, tiene el panorama de toda la cancha y con sus balones podría encontrar al delantero y los volantes externos en buenas posiciones.

Si se juega con un solo delantero, alinear a Falcao o a Teo, condicionaría de manera distinta la propuesta de ataque. Con Falcao, se apuesta más a ganar rebotes, y ganar faltas por lucha cuerpo a cuerpo. Se tirarían centros y desbordes. Jugar con Teo, le daría mucha vida a los volantes que lleguen. Teo no es goleador. No insistamos. Su virtud es encontrar al compañero que está en mejor posición, en interpretar lo que pida cada jugada. Su capacidad para pibotiar y encontrar al hombre libre, sería fundamental para la llegada de atrás de los volantes.

Como Messi y Pastore no son volantes externos fijos, y como ya dijimos juegan descolgados y en defensa no son muy sacrificados, Colombia podría herir por las bandas con los tándems Zuñiga-Cuadrado y Armero-Ibarbo haciéndole un 2 vs 1 a Rojo y Zabaleta.

 Con ésta opción, Colombia jugaría con: Ospina, Zuñiga-Zapata-Murillo-Armero; Mejía; Ibarbo-James-Cardon-Cuadrado; Teo o Falcao.


Mejía sería el eje y equilibrio del equipo. Tapando el espacio donde Messi y Pastore son mas influyentes.



LA CLAVE DEL PARTIDO: LA BANDA IZQUIERDA.

El eje izquiero de Argentina no tiene profundidad. Rojo es limitado en ataque, no sube tanto como Zabaleta y Di Maria tiende a ir más hacia adentro que hacia la de cal. No juega de extremo en Argentina, es más media punta. Y Pastore es a veces 8 a veces 10. Juega suelto y al ser derecho y lento, tampoco va a buscar a Zuñiga para desbordarlo.  El otro eje, el derecho, es la espada de Martino. Zabaleta-Messi-Pastore es donde hay que escalar las marcas.

Messi perfilado para encarar de afuera hacia adentro, con Zabaleta que pasa muy bien al ataque y Pastore que se ofrece a seis metros, contra James y Armero, es un escenario ideal para Argentina y apocalíptico para Colombia. Alinear a Arias de lateral izquierdo es una opción que seguro ha barajado Pékerman. Al marcar a Messi, tendría su pie hábil para cortar la conducción de Messi hacia adentro.

Con James en la mitad y Arias e Ibardo en el eje izquierdo, habría mas velocidad y rigor para contener el tándem Zabaleta-Messi. Aunque, aquello de ponerle un derecho a Messi, ya lo probó Valverde con Balenciaga hace un mes. El planeta entero asistió a un recital de como burlar una marca al hombre.
 

Eje izquierdo: Messi-Zabaleta-Pastore es el lado fuerte de Argentina.

Sabemos que mañana James puede desatarse, patiar la pizarra y dejar en ridículo cualquier intención predictiva. Insistiremos hasta el final de los días que el fútbol no cree en nadie, que desconoce de tendencias y principios y que sólo puede pertenecerle a los descreídos. Sabemos que la táctica tiene sus límites, y que ese orgullo y esa fuerza interna del jugador por defender sus colores, también será fundamental. El resultado será fruto del capricho de un juego, del cual, todos somos exiliados.


1 comentario:

  1. Buen análisis, ojalá lo estudien quienes deben tomar decisiones.

    Un saludo cordial

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